Ya era demasiado mayor y no salía nada de casa, por lo que decidió aplicar aquél procedimiento que de joven ya había usado; paso, piedra, paso, piedra... siempre dejando rastro por la habitación, por el baño, la cocina... A él no le pasaría lo que a los demás, que se fueron y no supieron volver. Llegado el momento, haría lo que de niño hizo con su hermana en el bosque... regresaría.
Filantropía del retorno. Bonita idea.
ResponderEliminarY Gretel????
ResponderEliminarLo de ella no eran las piedras Novia, no volvió ;)
ResponderEliminarTriste, conmovedor, FABULOSO!!!
ResponderEliminarUn abrazo admirado Su
Tengo en mi blog una página donde copio algunos de los micros que más me gustan (citando autor y blog por supuesto)Date una vuelta, si me autorizás me gustaría contar con éste.
Claro que te autorizo Patri, no faltaba más.
ResponderEliminarUn abrazo.
Espero que no olvidara cual eran sus piedras ya que el camino esta lleno
ResponderEliminarVaya...me he quedado Petrificada, con el rostro de piedra...¿Volvió? ¿se perdió?...ostras, el sábado Lia leyó tus microrrelatos en la biblio.. en el grupo de lectura e hizo fotocópias para todos...que chulo, como gustaron su...preguntaban por ti y yo, aunque iba de invitada, les dije que tus piernas eran de vértigo...je,je,je...en serio, Lía les dijo que eras nuestra microrrelatista favorita...
ResponderEliminarMaravilloso micro.
ResponderEliminarTambién me gustaría saber hacer ese camino de piedras que me recuerden siempre como regresar.
Un abrazo.
Tristemente, hay lugares de donde no se puede regresar aún marcando el rastro.
ResponderEliminarFantástico microrrelato!
Un abrazo
Martina, no sabes lo que me alegra que hayan gustado. Un día tengo que publicar algo de Jane Russell en "Mirando atrás" o hablar de esa fabulosa película que protagonizó con la Monroe "Los caballeros las prefieren rubias", has elegido una foto suya estupenda.
ResponderEliminarTowanda, gracias por tus palabras ;) Un abrazo.
Así es Mimosa, son viajes de no retorno. Un beso.
paso, piedra, paso piedra, buenisima idea de repente me pierdo en la calle, ja,
ResponderEliminarbesitos su
Excelente Su! Admirable tu capacidad para reflejar una situación de manera tan apropiada! Un honor leerte amiga!
ResponderEliminarSU, gracias, mil gracias por dejarme compartir tus historias con los compañeros de la biblioteca. ¡Fue estupendo! Para San Jordi me gustaría leer algunos más en un acto público que se celebra en la ciudad.
ResponderEliminarBesitos amiga.
Eh, que bueno !! Así, sencillo , directo, efectivo...Me ha gustado.
ResponderEliminarMe há encantado.Un besote su
ResponderEliminarLía... gracias a ti, ya sabes que me tienes aquí. Besoss
ResponderEliminarGéminis jaja pero lleva un buen puñado.
Bee gracias, me voy a poner colorada.
Luz, un beso amiga.
Rombo, el guitarrista que tiene loco a las nenas jajaja... las tienes a todas alteradas en tu blog. Nos vemos.
Estupendos tus relatos. Llego desde el blog de Lía que te ha recomendado y estoy echando un vistazo con tu permiso.
ResponderEliminarEl camino parece lleno de piedras, espero que las que tira el protagonista sean diferentes o se perderá.
Un abrazo
Osti, qué bueno.
ResponderEliminarTe he leído dos micros hoy y no sabría decirte por cual decantarme.
Sigue así.
Besos, Su.
Gracias Su, ahora me lo llevo. Un beso.
ResponderEliminarMe ha recomendado Lía que te visite y estoy encantada. La entrada de Lía en su blog Musas es maravillosa y he leído el enlace que ha colgado. Para empezar este jueves es maravilloso leer algo tan bueno. Ya disfruté de tus cuentos en la biblioteca de Lleida, cuando nos pasó una fotocopias con cuatro microrrelatos y en la asociación de lectores compulsivos, que te tenemos como madrina.
ResponderEliminar¡Bravo!
Muack.
EMMA me alegro de que te gusten, aquí tienes las puertas abiertas para venir cuando quieras.
ResponderEliminarUn beso.
JL bienvenido también, tienes todo mi permiso para pasearte por el blog ;)
ResponderEliminarTorcuato aún me falta el micro para mandar al concurso de "El Microrrelatista"... ufff tengo que darme prisa, aunque la idea ya la tengo ahora sólo me falta meterla en 100 palabras jajaja. Bueno, un abrazo.
Precioso, Su. Y la referencia final es... ferpecta.
ResponderEliminarBesos de piedra.
Ya lo he dicho en el blog de Lía, tienes talento y mucho. Pertenezco a la asociación de lectores Compulsivos y te aseguro que aplaudimos cuando Lía acabó de leer tus cuentos. Después me pasé la noche leyendo tu blog y como mi amiga me dijo que iba a hacer una entrada especial esperé para felicitarte.
ResponderEliminarSaludos artista.
Tengo una duda Su, aparte de tener un nombre precioso y escribir como una diosa, ¿tienes un ratón?..je,je..Lía nos ha picado y aquí estamos una pandillita de El Club negro.
ResponderEliminarGracias Kum*, siempre es un placer tenerte por aquí. Un abrazo.
ResponderEliminarMarta, está visto que me queréis poner colorada entre todos jajaja, mil gracias por tus palabras y bienvenida.
007 jajaja el único que tengo es el del ordenador y ya es suficiente. Te doy también la bienvenida ;)
Una piedra en el camino
ResponderEliminarMe enseño que mi destino
era rodar y rodar...
No pillé muy bien el sentido de las piedras, pero es un relato muy atractivo. Enhorabuena.
ResponderEliminarLa esperanza el lo último que se pierde.
ResponderEliminarTransformas una escena sórdida en una estampa amena.
Más saludos