Seguidores

3 de enero de 2011

Edredones reciclables.



Muchos en la calle esperaban con impaciencia el paso de los Reyes Magos, unos deseando juguetes, otros la caja más grande... el frío por aquellas fechas era insoportable, y entre lazos y papeles de colores siempre se podían encontrar cosas.

18 comentarios:

  1. Siempre es bueno dar una segunda lectura a la utilidad de las cosas.

    Un saludo de regalo

    ResponderEliminar
  2. Una bofetada de realidad! Las dos caras de una misma moneda. En este caso, de una misma caja... Excelente Su! Un saludo enorme! P/D: Saludos y mucha fuerza para tu hermana!

    ResponderEliminar
  3. Un gran giro para este cuento que comienza con la ternura de una historia infantil y termina con un golpe nocaut.
    Bravo Su!

    ResponderEliminar
  4. Tremendo recordatorio de que en estas fechas no todo el mundo puede llenar la barriga y gastar (o malgastar) el dinero. Me ha encantado, bueno, como todo lo tuyo, jajaja. Abrazotes.

    ResponderEliminar
  5. Tus líneas son brutalmente honestas.
    Toca dejar el consumismo.
    Un abrazo.

    ResponderEliminar
  6. Ya tenemos de vuelta a la reina del microrrelato. ¡Magnífica Su!

    ResponderEliminar
  7. Bienvenida de vuelta, Su. Qué bueno que estás aquí otra vez.

    Un beso grande para tí y otro para Chula...

    ResponderEliminar
  8. Querida su, te extrañe! me alegra leerte otra vez, una realidad triste ver esos edredones por la calle.
    besitos su

    ResponderEliminar
  9. Nada se pierde...

    Todo se transforma...

    Crudo y real... y lamentablemente cotidiano...

    Besote, es magnífico!!!!!

    ResponderEliminar
  10. Que gusto leerte maja...más MUACKS...

    ResponderEliminar
  11. Esta es nuestra realidad! Hagamos que mejoren las cosas.
    Un abrazo

    ResponderEliminar
  12. Lo malo es que cuando los vemos, nos fijamos más en la litrona o el tetrabrik, que en el edredón.
    besos.

    ResponderEliminar
  13. Bien reflejada la doble moral de la navidad.
    Un beso.

    ResponderEliminar
  14. A veces tan cerca y a la vez tan distantes las dos caras de la vida, es increible la capacidad de la vista humana para tan solo ver lo que quiere ver y lo demás obviarlo...En fin, una lástima esto.

    Saludos.

    ResponderEliminar
  15. !Que verdad nos has contado hoy, a los que siempre vamos con los ojos tapados ,
    Un besote guapetona!

    ResponderEliminar
  16. Buenísimo Su, me encanta. Bueno, me encanta el micro, y no la realidad que encierra.
    Me lo prestas para leerlo por ahí?
    Un abrazo

    ResponderEliminar